Una de las búsquedas más complejas que existen es la que realizamos para encontrar nuestra crema perfecta. Quizás para algunas afortunadas ésta búsqueda no haya sido tan ardua y piense que estoy exagerando, pero para la mayoría de las "mortales" en la que me incluyo, es agotadora. Compras una crema hidratante, como es mi caso, y si es demasiado fuerte empiezas a ver como te salen granitos, otras veces no lo es y sencillamente no notas que mejore nada. A eso le unes, que necesitas que tenga un alto factor de protección solar por que si no con el sol te empiezas a llenar de pecas y manchas solares... en fin, un calvario. Y de repente, descubres Archangela.
